sábado, 27 de diciembre de 2008

Y vaya que son muchos...

Santos párvulos

Como un previo al 28 de diciembre, que no debería celebrarse un solo día pues en todos los demás del año se aplica con las noticias y comunicados que nos envían desde Los Pinoles, secretarías y órganos legislativos, enlistamos a los que se llevaron el título de Inocentes del año.


El góber copetes que se enamoró de una Gaviota que anunciaba compromisos cumplidos con spots bien cursis. Ahora, que es su novia, no la deja salir en las novelas para que no le vaya a pasar lo mismo que al Carnal con Mariagna.

El que acusó de esquizofrénico a un conductor de radio, pero que dice que el gobierno no ha cumplido en seguridad y después que sí, porque tiene mano dura.

El chucho que pidió perdón por el chuchinero con el que ganó la presidencia de su partido gracias al fallo del Tribunal que le quitó, según decían en 2006, la presidencia de la República a su partido.

El Norroñas que por esto se salió del sol azteca haciendo berrinche, pensando que muchos lo iban a seguir, y que todavía los sigue esperando.

El Carnal que sueña con puentes y circuitos bicentenarios en 2012 y aún no termina de deslindarse de su antecesor, o mejor dicho, de despejarse.

El Rayo que había conseguido que no pasara la Reforma privatizadora de Pemex (que muchos consideraron un triunfo) y después tuvo que mantener ocupadas a sus brigadas de Adelitas con otras causas.

El que su partido no ha ganado nada en este año, (y no hablamos del Cruz Azul) pero que confía plenamente en que ganarán algo para 2009. Aunque no sepa como lo harán.

El senador descendiente de Francisco Madero que quiere que le hagan un monumento a Carstens por haber detenido la crisis que no era un catarrito, sino una pulmonía de categoría Zongolica.

El que se va a casar con el perdón del Vaticano por su enfermedad mental y anda juntando su dinerito, pero para la boda, no para terminar de construir su Foxilandia.

La secretaria de Educación que rebautizó la novela de Carlos Fuentes La región más transparente; le puso La ciudad más transparente.

A los que la Maestra les iba a regalar su camionetota, pero que a la mera hora decidió rifarlas, aunque no se sabe para cuando.

El que sigue pensando que se está ganando la guerra contra el crimen organizado con más de 7000 muertos en lo que va del sexenio.

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